Elaboramos el Lenguaje de Descripciones Simbólicas, la Lengua Nashêh-kôhma, fusionando los rayos de diamante y oro que emanan del corazón, hecho de oro y diamante, inherente a cada miembro de la Familia Esêh-nerâh – Consejo de Guardianes de la Sabiduría. Este corazón sirve como nexo a través del cual articulamos nuestros talentos profundos o, como preferimos llamarlos, vibraciones características.
El Consejo está compuesto por 21 estimados miembros, cada uno aportando una vibración característica única a la Lengua Nashêh-kôhma. Estas vibraciones, que funcionan como códigos, representan letras individuales dentro del alfabeto de este lenguaje. Originarios de lo más profundo de nuestros corazones, estos códigos encarnan la esencia del oro y el diamante, correlacionándose con los 21 latidos necesarios para pasar de la potencialidad a la realidad.
En la academia, hemos diseñado un set de cartas de oráculo dedicadas a la exploración de La Lengua Nashêh-kôhma. Cada carta, un reflejo de la danza cósmica, actúa como una llave maestra hacia las profundidades de este idioma, presentando las letras de su alfabeto en un hexágono de diamante, inscritas en oro, para capturar su esencia.
En los reinos del Templo Interior, el idioma Nashêh-kôhma adquiere un profundo significado. Hemos aprovechado su poder para construir los Ayulhglifos, una parte integral del Principio de Composición y el Principio de Sinfonía. Aquí, las consonantes del alfabeto sirven como elementos fundamentales de los códigos de luz, mientras que las vocales actúan como la fuerza dinámica que da vida a los Ayulhglifos.
Además, el Portal Kodoshi, una construcción tridimensional dentro del Templo Interior, actúa como un conducto para el Idioma Nashêh-kôhma. A través de este portal, enviamos y recibimos códigos multidimensionales, traduciéndolos en vibraciones sonoras y viceversa. A medida que el Portal Kodoshi compila nuestros códigos en vibraciones sonoras armoniosas, se convierte en un instrumento vital para la programación de la Matriz Individual, alineándose con los principios del Templo Interior y la Danza Cósmica.
La interacción entre el idioma Nashêh-kôhma, los Ayulh glifos y el Portal Kodoshi forma una danza intrincada, una sinfonía armoniosa dentro del Templo Interior. Estos elementos convergen para amplificar las frecuencias vibratorias, uniendo los reinos de potencialidad y actualidad, y guiando al practicante adepto en un viaje transformador a través de la
Danza Cósmica.
